En 1847 Domingo F. Sarmiento llega a Nueva York y, fascinado con lo que ve, cambia su modelo de civilización, que ya no estará forjado sobre Europa sino sobre Estados Unidos. Un siglo y medio  después, el autor recorre los pueblos de Nueva Inglaterra, los lagos de Ontario buscando la huella de Sarmiento. Es un libro generoso, palpitante, una mezcla de registros: relato de viajes, ensayo histórico, relato epistolar y también puede ser leído como una novela.