Visita guiada a la Ópera "Pagliacci" de Ruggero Leoncavallo, comentada por Enrique Caride

En el marco de su Ciclo Visita guiada a la ópera, Enrique Caride presentó El lunes 28 de agosto la Ópera "Pagliacci" de Ruggero Leoncavallo, comentada con proyección audiovisual en pantalla gigante.

 

 

Pagliacci es un drama en dos actos con un prólogo. La música y el libreto en italiano pertenecen al compositor Ruggero Leoncavallo, y la obra relata la tragedia de un payaso y la infidelidad de su esposa en una compañía teatral de la comedia del arte.
Esta obra viene a consolidar en Italia un movimiento, impulsado por jóvenes compositores como Mascagni, el propio Leoncavallo y Puccini, al que se ha denominado “verismo” (por “vero” que significa “verdadero”), en el que ya no se tratan temas de dioses o reyes, sino de gente común acosada por dilemas cotidianos.
Caride propondrá pasear por la obra Pagliacci en un audiovisual en pantalla gigante y revelar los secretos que transformaron la partitura de Ruggero Leoncavallo en una de las páginas inmortales del género.

Composición:
Alrededor del año 1890, cuando Mascagni estrenó Cavalleria rusticana, Leoncavallo era un compositor poco conocido. Después de ver su éxito, decidió escribir una ópera parecida. Iba a ser en un acto y compuesta en estilo verista. Le demandaron por plagio del libreto de Catulle Mendès, cuya obra de 1887 titulada La Femme de Tabarin comparte muchos temas con Pagliacci, principalmente la "obra dentro de la obra" y el payaso que asesina a su esposa. La defensa de Leoncavallo fue que la trama de la ópera se basa en una historia verdadera que había visto de pequeño. Afirmó que un criado lo había llevado a una representación de la comedia del arte en la que los acontecimientos de la ópera habían realmente ocurrido. También dijo que su padre, que era juez, había llevado a cabo la investigación criminal, y que tenía documentos que apoyaba estas alegaciones, pero nada de esta evidencia apareció nunca. Hoy la mayor parte de los críticos están de acuerdo en que el libreto se inspiró verdaderamente en la obra de Mendès puesto que Leoncavallo vivía en París en la época de su estreno, y es probable que viera la obra.